Algunos ya sabéis que mi piel es atópica, así que de vez en cuando me dan brotes de dermatitis y eccemas con los que tengo que batallar. Gracias a Dios, y digo esto cruzando los dedos, hace tiempo que no me da ninguno fuerte; aunque sí es verdad que mi piel sufre siempre de sequedad y tengo que estar continuamente hidratándola, sobre todo las manos (por fregar los cacharros que no puedo meter en el lavavajillas, supongo).
El caso es que cuando observo puntos rojos o granitos en la piel ya me saltan las alarmas. Pero cuando la piel reacciona como si me hubiera fustigado con un látigo, pues es algo a lo que no estoy acostumbrada, jajaja.
Una tarde de principios de febrero, me noté unas marcas en la piel del cuello y escote, como si me hubiera rascado.
Me resultó extraño, porque no recordaba haberme rascado en esa zona durante la mañana, pero no le dí la menor importancia. – «Quizá es la costura del cuello de la camiseta que llevo» pensé… «En un par de horas, cuando me ponga el pijama se habrá quitado«.
Cuando me fui a poner el pijama, me di cuenta, que las marcas (como de arañazos o de latigazos) ya no estaban sólo en el cuello y escote, sino sobre todo en la espalda (en toooda su extensión: de izquierda a derecha y de arriba a abajo).
Me quedé un poco con cara a cuadros y con la mosca detrás de la oreja. :O Pero como no me picaba ni nada, pues me fui a dormir con la esperanza de despertar bien por la mañana.
Por supuesto, la cosa no había mejorado a la mañana siguiente. Estaba igual. Si acaso, me escocían un poco cuando me rozaba la ropa. Aunque picar, no picaba.
Con todo y con eso, llamé por la mañana temprano a mi doctora y pedí cita, que me dieron para esa tarde a las 14h.
Al verme mi doctora (santa paciencia tiene conmigo la buena señora), lo primero que me preguntó…. «¿Te pica la piel? Porque tienes marcas de haberte rascado por el escote y por toda la espalda«… Le dije que no, pero ella insistía en la pregunta. Cuando se aseguró de que yo decía la verdad (jajajaja) me miró detenidamente, intentando averiguar qué demonios era eso que me recorría el cuerpo. Me sacó sangre para ver si no fuera un herpes o la varicela…. pero los resultados fueron negativos.
Ante esa situación, pidió cita urgente para que me examinara un dermatólogo que hay en Thalwil. Esa misma tarde me tocaba ir de nuevo a las 17h a una consulta de dermatología. Mi primera vez, ¡chispas!… xD
El dermatólogo, un chico joven, pero no más joven yo, me volvió a examinar y me preguntó mi historial dermatológico. Le dije que mi piel tiene tendencia a la dermatitis atópica, pero que ya tengo experiencia en detectar yo misma los brotes y que hacía mucho que no me salía uno, porque me cuido mucho la piel. Además, que aquello no tenía aspecto en absoluto de dermatitis atópica.
A él le extrañaba tanto o más que a mí que el patrón que seguía el sarpullido fuera como de marcas de latigazos o arañazos. Me preguntó si me picaba; le dije que no, que más bien a estas alturas ya (llevaba unas 48h con el sarpullido) me escocía más que me picaba. Me preguntó también qué había comido estos últimos días. «Uhm… no sé… rösti, coliflor al horno con bechamel, gnocchi con shiitake, ensalada caprese de tomate y mozarella…. lo normal. Nada de huevos, nada de salsa…. no soy alérgica a ningún alimento, salvo por una intolerancia al kiwi que hace décadas que no como….«.
Para cuando yo terminé mi parrafada, tenía al dermatólogo sonriendo y con los ojos como platos diciendo… «Nooooo, no puede ser… no puede ser…. joer, qué suerte tengo!» .
–¿Perdón?
–No, disculpa… es que creo que lo que tienes… no puede ser… (se sonreía él solo). No… sí…. no puede ser… creo que lo que tienes es una dermatitis por shiitake…. es mi primer caso. Cuando estudiaba en la facultad, una compañera de clase que estaba de prácticas en una consulta, nos dijo que le había llegado un caso de una mujer que había comidos setas shiitake en un restaurante chino y al cabo de 24-48h le habían aparecido marcas como las tuyas. Pero yo, personalmente, en toda mi vida profesional, no había visto ningún caso. Estoy feliz, es la primera vez que lo veo… .
–Hombre, yo encantada de haberle alegrado el día (pensé, qué digo el día, la semana…..), pero a mí no me alegra tener este sarpullido. Que menos mal que mi marido no es celoso, que si no iba a pensar que el amante había sido muy bruto…. jajajaja.
Nos miramos los dos y nos tuvimos que reir, claro… xD
Por lo que he visto en internet y en la wikipedia la dermatitis shiitake fue detectada por primera vez en 1977 (es casi tan vieja como yo, bueno igual de vieja que Luy). Hay más casos en China y Japón, obviamente, por ser estas setas originarias de esa zona. El primer caso detectado en el mundo occidental fue en 2006 en UK. Pero claro…. la gastronomía asiática se está poniendo de moda y está empezando a convivir en nuestro día a día occidental, así que se están extendiendo patologías de esos lares que para nosotros no son conocidas.
Básicamente se produce al comer cruda o poco hecha esta seta. Eso fue lo que me pasó a mí…. que me había hecho dos días antes un plato de gnocchi con shiitake, pero me pudo el hambre, así que no terminé de hacer bien las setas. Porque si no, no me lo explico: ya había hecho ese plato al menos en dos ocasiones más y no me había pasado nada; y somos de ir al restaurante chino de Thalwil o traernos la comida del chino a casa al menos una vez al mes…
Afortunadamente, en el 90% de los casos, se cura a la semana con un simple tratamiento por vía tópica. El dermatólogo, después de hacerme un book de fotos que ni a una modelo (le tenía que haber hecho pagar los royalties … Jajajaja) me puso un tratamiento de pomada de corticoides y pastillas de antihistamínico y efectivamente, a la semana ya no había ni rastro. Yupi!
Eso sí, al día siguiente de mi visita a su consulta, me llamó para explicarme que se había puesto en contacto con el Unispital (por lo visto son los especializados en este tipo de dermatitis) y que su recomendación era comer la próxima vez una porción muy, muy, muy pequeña de setas y muy bien cocinadas. Y que esperara unas 24-48 horas a ver cómo reaccionaba la piel (por cierto, recomendación que aún no he llevado a cabo, jajajaja).
Por si acaso, también me hizo recoger en consulta un kit de emergencia (contiene anthistamínico y corticoides en pastillas), por si voy al extranjero o como en algún restaurante chino. Lo tengo que portar conmigo siempre.
En fín, siempre me gustó coleccionar cosas…. pero cuando empezamos a coleccionar dermatitis, es que estoy hecha un canastito de chucherías…. xD