Debería escribir un poco sobre las “no-vacaciones” que tuvimos en septiembre y sobre lo que pudimos hacer y ver cuando estuvimos en España. Pero parece ya tan lejano que no me apetece escribir ahora de eso.
De lo que sí quiero hablaros hoy es de una exposición a la que hemos ido este domingo: The Art of the Brick (de Nathan Sawaya)
Quien espere encontrar reproducciones a escala de cosas hechas con los famosos ladrillos de Lego®, está en parte desencaminado. ;)
Por supuesto que hay cosas a escala, pero se trata, fundamentalmente, de la obra de un artista que utiliza los Lego® (como podría haber usado pinceles, acualeras, bloques de mármol o cualquier otra cosa de estilo tradicional) para expresar su forma de ver la vida y sus relaciones con el mundo interior y exterior.
Sin duda la parte que más me gustó es una que explora la condición humana, y de la que os pongo aquí algunas obras (y los algunos comentarios del propio autor).
Stepladder: “Sometimes when you’re looking for a step up, you don’t have to look any further than yourself. We’re all capable of more than we think“.
Building Red: “Every day, life strips bit of us away, and every night we put back ourselves back together again. Growing a little stronger in the process.”
Desintegration: “Beware the winds of life that nibble away at your sense of self. Stay strong“.
Everlasting: “Love lives forever. It outlives youth and a flat stomach and a full head of hair. And that’s what makes it beautiful”
Grasp: “Whatever your hidden desires, there will always be hands holding you back. Life’s challenge is to find the strength to escape from those chains. I created this sculpture as an answer to all those who have told me “no” to my face. I wanted to detach myself from these people“.
Hay también una muestra de su interpretación sobre otras obras famosas como la Monalisa de Leonardo o el David de Miguel Ãngel, aunque sin duda a mí me llamaron más la atención éstas otras:
Si tenéis la oportunidad de verla aquí en Zürich, no lo penséis dos veces.
¡Merece la pena!
Jo que sí merece la pena!! Lástima que esté tan lejos jejejeje menos mal que pone el simbolito de no tocar, dan ganas de ponerse a jugar con las esculturas ;-)
Es itinerante, Pablo. ;) ¿Quién sabe? Lo mismo algún día la exponen en España…
Al final, había una sección con ladrillitos para hacer tú una escultura, jajaja
Tiene muy buena pinta, pero acabo de ver que el año pasado ya estuvieron en DublÑn, jo!
Eso se arregla con una escapada a Zürich ;) Sitio ya sabes que tenéis, jajaja.