Catarrazo del copón.  :(

Con todo lo que tendría que hacer esta semana, el planchado de mis cortinas (y tener la ventana abierta para no morirme de calor mientras plancho) me deja  un bonito catarro.

Odio cuando los Kleenex se convierten en mis mejores amigos, y cuando voy de rincón a rincón del sofá con la manta cual amigo de Charlie Brown.

Ni siquiera puedo ver la tele, la caída de párpados no me deja. Me he pasado dormitando medio domingo, el otro medio sin ganas de comer, con pesadez de estómago y congestión nasal.

Ahora sí que me vendría bien un insuflón de inhalaciones de wasabi para despejarme las fosas nasales…