Pues ahora que se han ido las visitas toca volver a la rutina.
La mía no es otra que ver pasar los días, hacer la colada y, como mucho, ir a clase de alemán lunes y miércoles.
Llevaba ya algún tiempo queriendo hacer algo que añadiera un aliciente a mi escasa rutina, y entre todas las ideas que tenía, una de ellas era la de retomar mis clases de flamenco.
Y tras mucho buscar y enviar emails a distintos sitios, encontré una chica de Cádiz (del barrio de la Viña, casi ná) que lleva casi 15 años en Zí¼rich.
El grupo, que es pequeñito, empezó la semana pasada, pero con la visita de Ana no pude ir. Hoy he ido y no ha estado mal. Hemos empezado con sevillanas, que técnicamente no es flamenco, pero tampoco voy a pedirle peras al olmo. Además, me sirve para repasarlas que desde que las aprendí de pequeña no las había vuelto a bailar y se me ha olvidado de la segunda pa’lante… XD
Espero que más adelante, conforme vayan pasando las clases, vayamos avanzando, que lo que me gusta es un buen zapateo… :)
Eso sí, bienvenida más calurosa que la que tuve nada más entrar en clase no creo que vaya a encontrar en ningún sitio. :) Isabel, la profe, nada más saber que yo también era de Cádiz, me dió tal achuchón, que parece que me conociera de toda la vida… XD Ains, ese angel sólo se tiene en mi tierra….. :)
Estais preparando alguna coreografÑa en concreto? Si haceis “funcion final de curso” avisa, que me apunto a veros ;-)
Mira que aprender flamenco en Suiza!!!!!!