Ayer acabé molidita, así que ni se me pasó por la mente escribir el post correspondiente a cómo me había ido todo en el “traning day”.
Llegué allí quince minutos antes de la hora estipulada (si llego tarde con lo cerca que estoy hubiera sido pa matarme…:P), así que a las 9:45 allí estaba yo con mis pantalones negros y mi camisa blanca… y un jersey celeste encima que solo con la camisa debajo del chubasquero hacía frío…. por muy cerca que estuviera de mi casa, leñe…. ;)
Una vez presentada yo misma al manager (en adelante Joseph), me acerqué a los demás y saludé. Había dos italianos, dos filipinos (de los de Filipinas, no de los de comer…. XD), un hindú y un francés. Eso de los que ya estaban trabajando allí…. y todos sirviendo detrás de la barra. Entre las camareras (menos Margaret, la holandesa) todas estábamos de training… Joanna (Brasil), Magda (Polonia… por qué todas las polacas que he conocido aquí se llaman así??), Katerina (Italia), Elisabeth (Sudáfrica) y yo. :)
Pos nada, resultó que lo que había que hacer era servir un catering para una recepción de esas de los funerales, así que cuando empezó el jaleo (es decir, a llegar la gente) tocó ir bandeja arriba, bandeja abajo por todo el salón… Yo me dí cuenta entonces de lo obsesionados que están los ingleses con esto de lo vegetariano… ¿Esto lleva carne? ¿Esto es vegetariano?…. me hacían la misma pregunta una y otra vez, incluso habiendo dicho yo… “This is vegetarian”… ¿La gente no escucha?.
Y así fue pasando el día… cuando las bandejas de comida tardaben en salir de la cocina, yo procuraba ponerme a hacer otras cosas: recoger las copas vacías, colocar las servilletas, tirar las botellas vacías… más que nada para hacer méritos… jajaja. Así no me veían ociosa… ;)
Y poco a poco, los momentos cumbres y de mayor tensión se fueron. Aún quedaban unos pocos invitados, pero ya no hacía falta que estuvieramos todos pendientes, así que los de cocina nos hicieron varios canapés, una ensalada y una bandeja de pasta bien grande para todos nosotros… y tocó el turno de comer y relacionarnos un poco. :)
Mimmo, uno de los italianos, era de Roma pero lleva viviendo en Londres 6 años. Decía que si en todo este tiempo el lo que había aprendido más que inglés era el “cockney” (el dialecto londinense), evidentemente bromeaba, pero lo cierto es que cuando hablaba en inglés tenía muy marcado su acento romano… jajaja. Me partía. Cuando me escuchó hablar en italiano, del tirón me dijo que se notaba que había aprendido a hablarlo en Bologna, porque aún se me notaba el acento… y también, que para hacer casi dos años que no lo hablaba de manera regular aún conservaba bastante de mis conocimientos…. (Realmente me ganó con eso…. :P)
Daniel, uno de los filipinos, empezó a contarme la cantidad de palabras que tienen en su país de origen español: silla, espejo, agua… y se empeñó en buscarle novia a Bashka, el hindú. A ser posible unas cuantas, porque según él Bashka se podía casar con tantas mujeres quisiera… a lo que el chico en cuestión respondía en broma: con tantas a las que pueda mantener… a no ser que sean ricas.. ;)
Elisabeth, la chica sudafricana, parecía tener unos 15 años o menos incluso. De hecho nos llamó la atención ver a alguie tan joven en el bar…. y al final resultó que sólo tenía el aspecto, porque tenía 24 años y llevaba casada uno!! La pobre contaba que cuando entraba con los amigos en algún pub siempre le pedían el carnet… bueno, el pasaporte… que aquí en Inglaterra eso del DNI no existe (de momento).
Hablando, hablando fue como me dí cuenta de que casi todos los que estaban ya contratados vivían cerca de la zona: Plaistow, Leyton, Walthamstow, Dalston… así que me ha dado un pocquito de esperanza… :) (Sí, ya lo sé… pero dejadme vivir la ilusión de momento, no? XD).
Al finalizar el día, estuve hablando con Joseph y me dijo que ya me llamaría, que aún no tenía nada concreto, pero que todo había salido muy bien y que estaba contento con cómo habíamos trabajado todos. Alexis, otra de las managers, me preguntó que donde vivía yo, y cuando le dije que vivía en “The Heights” (así es como se conoce a mi edificio en esta zona) me dijo, “ah, tú fuiste la que me mandó el C.V. por e-mail!!, ya me acuerdo!!”. Espero que también se acuerde pa darme el trabajillo, jajaja.
Cuando llegué a casa estaba contenta….(y eso que al final no me pagaron)…. y ahora toca esperar… aunque ya lo dice el refrán: “A Dios rogando y con el mazo dando” ;)