Ingredientes:
– 1 lámina redonda de hojaldre
– 1 brócoli de tamaño mediano
– 2 ó 3 lonchitas de salmón ahumado (de ese cuadrado que se usa para los sandwiches)
– 2 huevos
– 125 ml. de nata líquida
– 1 cebolleta (spring onion)
– sal y pimienta a gusto
Preparación:
Precalentar el horno a 200 grados.
Forrar un molde redondo con la masa de hojaldre y pinchar el fondo con un tenedor. Reservar en el figorífico mientras se prepara el resto de los ingrendientes.
Lavar y separar los ramitos de brócoli al tamaño deseado.
Picar la cebolleta y el salmón ahumado.
Batir los huevos junto con la nata.
Sobre la masa de hojaldre, echar primero la cebolleta y luego el salmón ahumado.
Regar con la mezcla de huevos y nata. A continuación, colocar el brócoli por todo el molde, procurando que quede uniforme sobre el molde. Salpimentar a gusto.
Hornear unos 30 minutos o hasta que el hojaldre y la mezcla de huevos y nada esté doradita.
Notas:
No sé si os habéis dado cuenta, pero no he cocido ni hervido al vapor el brócoli. Separé ramitos más bien pequeños, de manera que al meterlos al horno, se hagan ellos sólos con el calor.
A mí, personalmente, me gusta bastante más este tipo de verduras (coliflor, brócoli, romanesco, etc.) si queda durita. Además he leído que si se hierve (aunque sea poquito) pierde muchísimas de sus propiedades, aunque esto lo tendría que confirmar con mi amiga de Diet Today. ;)
Si esto es verdad, ¡sería una lástima desaprovechar las propiedades tan magníficas que tiene este tipo de alimento!
Mmmm, desde luego tiene una pinta estupenda!! Y haces muy bien en no cocerlo, salvo que vayas a usar luego el caldo de las verduras para algo, ahi queda mucho de lo bueno!!